La manifestación fue convocada por un grupo de personas afectadas por las
políticas de los Gobiernos de Barcina-Jimenez y el de Barcina en
solitario: personas en paro, trabajadores que sufren recortes y
despidos, militantes anti-deshaucios etcétera. También había recabado el
apoyo, entre otros, del Consejo de Estudiantes de la UPNA, Herri
Ekimena y los sindicatos ELA, LAB, ESK, CGT, STEE-EILAS, EHNE e HIRU.
Los
convocantes han resaltado que la dimisión de Barcina es un clamor social
y que "hay que sacarla del Gobierno cuanto antes, desde el Parlamento a
ser posible, y si no desde la Calle". También han resaltado que la
crisis económica y política que vive Navarra no se puede solucionar con
un simple cambio de caras, sino que "hay que cambiar el modelo
antisocial y corrupto que nos ha traido a esta vergonzosa situación".